Tengo que confesarte que creo en el destino. Que creo firmemente que estamos predeterminados, que nuestros caminos están escritos, que podemos tomar miles de decisiones diferentes o dudar hasta el último segundo, pero que siempre terminaremos dónde se supone que debemos terminar. Sin más. No podrÃa explicártelo, ni siquiera tengo claro si yo misma soy capaz de comprenderlo del todo, pero es asÃ.
Por eso, quizá, este no sea el momento perfecto, el momento marcado, el momento sin más. Quizá es porque tenemos algo más preparado para nosotros, y el Universo simplemente no quiere que nuestros caminos se crucen ahora. O quizá es porque ambos somos lo suficientemente idiotas. No lo sé. Y no quiero saberlo.
Pero que sepas, que estoy convencida de que en algún momento dado, volveremos a encontrarnos. O seguiremos encontrándonos. Pero esta vez de la forma correcta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario